Recupera tus electrolitos en verano
Por May Luján para carreraspopulares.com
Lo estás comprobando en tus propias carnes. Cuando practicamos ejercicio físico sudamos, y al sudar, perdemos líquido. De hecho durante los días de más calor perdemos mucho líquido, pero ojo, también perdemos una sustancia que es importante que conozcas: los electrolitos.
Los electrolitos son minerales que contienen una carga eléctrica y que se encuentran en la sangre, la orina y los líquidos. Los principales son viejos conocidos: el sodio, el potasio, el calcio y el magnesio. Durante el ejercicio los perdemos y los debemos reponer.
Es importante recuperar estas partículas en nuestro cuerpo, ya que sus funciones son clave, tanto a la hora de practicar deporte como, en general, a la hora de ofrecer un correcto equilibrio en nuestras funciones corporales. Los electrolitos ayudan a nuestro cuerpo a mantener el balance de fluidos y un adecuado nivel de hidratación en nuestro organismo para que los distintos sistemas funcionen como toca. Además, son sustancias que contienen iones que el cuerpo necesita para mantener la tensión entre las células y tener una buena química en la sangre y para la acción muscular, evitando los temidos calambres.
Así, para los deportistas, mantener ese equilibrio en los niveles de electrolitos es clave. Para conseguir ese perfecto equilibrio, algunos expertos aconsejan, además de una alimentación sana, alternar agua con bebidas para deportistas.
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En las bebidas isotónicas
Las bebidas isotónicas contienen agua, hidratos de carbono y cuatro electrolitos que perdemos cuando sudamos durante la realización de nuestro deporte favorito: sodio, potasio, calcio y magnesio. En general, te ayudarán a mantener una hidratación equilibrada y, además, tus músculos funcionarán mejor y podrás seguir practicando tu ejercicio favorito con un mayor rendimiento y resistencia. Eso sí, sin pasarse. El exceso de electrolitos también pueden producir enfermedades. Busca tu equilibrio.
El trabajo de los electrolitos
Cada uno de esos minerales tiene sus funciones. El potasio, el calcio y el magnesio ayudan a que tus músculos funcionen mejor. El potasio ayuda a los músculos y los nervios a comunicarse y trabaja junto con el sodio para mantener los niveles de líquido en equilibrio en las células del cuerpo. El calcio ayuda a tener unos huesos fuertes y sanos, además de activar los nervios y los músculos, y el magnesio interviene en el metabolismo de proteínas en los músculos.
También en los alimentos
Los electrolitos no solo se introducen en nuestro organismo mediante las bebidas que consumimos. Hay alimentos ricos en estos minerales. De hecho, para personas que no practican un ejercicio continuado e intenso, los alimentos que consumimos en una dieta bien equilibrada ya proporcionan suficiente cantidad de electrolitos.
Las frutas y las hortalizas son ricas en electrolitos. También lo son el pan y los productos lácteos como la leche, el yogur y los quesos. Incluso, el agua con una pizca de sal o azúcar le proporcionará electrolitos a tu organismo. Las carnes y mariscos también son fuentes de alimentos altos en proteínas y electrolitos.
Si los observamos uno a uno, debes saber que la sal, el queso o la remolacha, por ejemplo, son alimentos ricos en sodio. El potasio puedes encontrarlo en la leche, el plátano, el salmón o el aguacate y el calcio en el brócoli, guisantes, pimientos, las sardinas o las almendras, también ricas en potasio y magnesio.
En resumen y como comprobarás, una alimentación equilibrada siempre nos resuelve buena parte de nuestros problemas nutricionales. También en este caso, pero ante la gran pérdida de líquidos –y electrolitos- que podemos sufrir en nuestros entrenamientos más exigentes, debes valorar la incorporación, tanto durante como después, de las bebidas isotónicas ricas en electrolitos.
