Normas de educación en plena carrera (I)
Por May Luján para carreraspopulares.com
Vale, no llevamos chistera ni pamela. No corremos con americana, ni zapatos de tacón. Pero no hay duda, los corredores somos ‘buenrollistas’ y, aunque vayamos con zapatillas y pantalones cortos, tenemos algunas cosas que ver con los ‘gentleman’ británicos. En resumidas cuentas, que en el deporte popular y en el running en particular se respira muy buena educación.
Aún así, no está mal recordar algunas normas no escritas que harán que compartir asfalto con otros compañeros y desconocidos sea una experiencia más placentera todavía. Recuerda que también debemos ir siempre calzados con una buena dosis de respeto a las carreras en las que participemos. Hay muchas, muchísimas pautas de buena educación que hacen que una carrera pueda salir muy bien. Aquí tienes unas cuantas de ellas.
- Avisa cuando haya un obstáculo en la calzada. Cuando vayas corriendo y te encuentres una grieta, un banco, un bordillo o un agujero en la calzada, por ejemplo, avisa a los corredores que vienen detrás. En ocasiones somos tantos que es complicado percibir estas trabas. Señálalos con el brazo y, si puedes, da un aviso con la voz para que los corredores que vienen detrás se percaten. Así evitaremos posibles golpes, caídas o lesiones.
- Los avituallamientos. Aquí hay mucha tela que cortar. Vayamos por partes. En primer lugar, a la hora de cogerlos, piensa que no corres a solas. No te abalances desesperadamente sobre las botellas o podrías chocar con alguien. Muchos de nosotros nos cruzamos desde el centro de la calzada hacia los voluntarios para que nos den agua sin importarnos si entorpecemos a otros corredores. Trata de ir colocándote en el extremo de la vía antes de que llegue y mantén la calma, generalmente hay muchas botellas, no tenemos que pelearnos por la primera.
Pero además, en segundo lugar, una vez te hayan dado el vaso, la botella o el alimento del avituallamiento, trata de deshacerte de los residuos tirándolos en algún contenedor o papelera. En ocasiones esto es posible. En otras ocasiones no lo es tanto. Si no puedes, déjalo en algún lugar donde entorpezca poco a los corredores que vienen detrás. En el caso de las botellas, es importante, además, tener una precaución doble. Si tiras una botella al suelo porque no te queda más remedio, es importante que no la tires en el mismo trazado de la carrera para que los demás corredores no la tengan que ir esquivando y, además, que la tires sin el tapón. Piensa que una botella a medio-vaciar pero con el tapón puesto es como una piedra, ya que si la pisamos, no se vacía y está dura.
Por último, ten la precaución de ofrecer agua o la bebida que te hayan dado a algún otro corredor antes de tirar el sobrante que no quieras. No te cuesta nada y puedes salvar la carrera de alguien que no haya podido coger o no se haya hidratado del todo bien.
- Escupir o enjuagarse la boca. Sí, no es lo más bonito del mundo, pero muchos corredores lo hacemos habitualmente por pura necesidad. Si necesitas librarte de exceso de saliva, siempre ten en cuenta que estás rodeado de otras personas. Vigila bien que no vayas a interferir con nadie ni a la hora de escupir, ni a la de enjuagarte la boca.
- Las trazadas. No te cruces innecesariamente. En cada carrera se juntan centenares de trazadas, una por corredor. Es casi un milagro que no nos vayamos golpeando los unos contra los otros. Tenlo en cuenta especialmente cuando vayas a tomar algún tipo de curva. Aunque creas que tengas ganada la trazada, puede venir algún corredor por detrás más rápido que tú. Dedícale solo una décima de segundo a ampliar la mirada al lado donde vas a girar con la finalidad de no entorpecer a nadie ni chocar contra otro corredor. En las rectas tampoco te cruces innecesariamente y, si lo haces, cerciórate de que no viene nadie.
- Los adelantamientos. Primero, si eres el que adelanta. Si ves que vas más rápido y hay algún grupo que ocupa la calzada, siempre con muy buen rollo y educación, puedes pedir paso para avisar que, cuando puedan, te dejen algo de espacio. En ese sentido, elige bien las palabras. La palabra ‘paso’ tiene las mismas sílabas que la palabra ‘perdón’, por ejemplo. A veces es tan importante cómo decimos las cosas que las mismas cosas que decimos. Siempre que lo pidas bien, te deben dejar paso.
Si eres el adelantado. Hazlo con seguridad y sin poner en riesgo a otros corredores, pero cede el paso siempre que alguien te lo pidan. Y, dentro de tus posibilidades, hazlo a la mayor brevedad posible. Así no interrumpirás en demasía el ritmo que llevan otros corredores más rápidos.