Ana Lozano, broche a un año soñado

Por Carlos Domingo para carreraspopulares.com

Decir que Ana Lozano ha tenido un año soñado seria mentir. Ni en sus mejores sueños contaba con llegar donde ha llegado. “Mi entrenador siempre me decía que podía llegar a un objetivo y yo no le creía... hasta que se cumplía”, esta frase la ha repetido una y mil veces a lo largo de la temporada. Javier Cañadillas era con la persona que más hablaba mientras estaba en el extranjero, Ana vivió a caballo entre Francia, los Países Bajos y Alemania para estudiar un máster enbiología evolutiva y ese contacto con su preparador era continuo, “era con la persona con la que más hablaba cada día”.

Una vez finalizado su periplo europeo y superado ese exigente master decidió ver hasta dónde le podían llevar las piernas. “Tengo ganas de saber hasta dónde puedo llegar” confesaba en las horas previas de la última carrera de su temporada. Ese hambre, el buen trabajo de Caña y su obsesión por dar el máximo la llevaron en la temporada de campo a través a ser la primera española en superar a TrihasGebre sobre el barro desde el 1 de febrero de 2015. Fue en Itálica. Fue el inicio de un año brillante.

Internacionalidad y final

Primero llegó Belgrado, en el Campeonato de Europa bajo techo se enfundó por primera vez la camiseta de la selección española. La serie previa de los 3.000 metros lisos en la capital serbia fue realmente bien. Con las cosas muy claras en la cabeza completó los giros con una mejor marca personal (8:56.01) que le valió la clasificación para la final en 6ª posición. En la carrera en la que se jugaban las medallas ella sabía lo que tenía que hacer, se puso a cola de grupo y fue como un reloj. Vuelta a vuelta fue cazando descolgadas y llegó a meterse en puestos de finalista. Aún alcanzó a un par de rivales más. Repitió esa 6ª posición y volvió a hacerlo con una mejora en su tope personal (8:55.20). Su debut intetnacional no pudo haber sido mejor.

Poco más tarde volvió a vestir con la elástica nacional para representar a España en Uganda. En Kampala se disputó el Campeonato del Mundo de campo a través y allí estaba Ana. “Me encanta viajar y conocer ese país me hacía muchísima ilusión”, además de disfrutar compitiendo también lo pasa bien conociendo nuevos países. Terminó 42ª y sumó “experiencia y una internacionalidad más” a la mochila.

Cierre a una gran temporada

Ha rendido en todas las carreras importantes del año. Ha sido un valor fijo, estable y que ha ido progresando zancada a zancada. Poco antes de empezar su temporada al aire libre confesaba que “hay que tener sueños grandes... ¿por qué no pensar en los 5.000 metros lisos de Londres?”. Ella sabía que eran palabras mayores, que haría falta correr muy rápido en una distancia que no había probado nunca. ¡Y vaya si lo consiguió! Consiguió la marca mínima fijada en los criterios de la RFEA y entró en la lista. Viajó a Londres en el segundo grupoy eso le permitió ver los primeros días por la televisión “vi el ambientazo y aluciné pensando que en unos días iba a correr allí”, confesaba a su llegada al hotel de España en Londres.

Y llegó el momento. Era su primera participación en un Campeonato del Mundo de pista. A Ana Lozano le había tocado en suerte la semifinal más dura. Nombres como los de la etíope AlmazAyana, vigente campeona mundial y bronce olímpico de la distancia, su compatriota Teferi que fue subcampeona en Pekín 2015, o las keniatas Obiri y Kiprotich estaban junto a ella. Por si no había suficiente con el batalló africano también compartía salida con la británica Laura Muir o la estadounidense Shannon Rowbury. A ella no le importó, se puso a ritmo del grupo de cabeza, agazapada, evitando el contacto “me siento muy mal cuanto toco a alguna compañera en carrera”, y centrada en su objetivo girando como un reloj.

Finalmente hizo su carrera “he podido coger la cuerda, algo raro en mi, y he sabido responder a los ataques” contaba nada más finalizar la serie, y lo volvió a hacer, rebajó su tope personal en cuatro segundos. Dejó anticuado el 15:18.07 con el que llegó al mundial y lo dejó en 15:14.23. Una 10ª plaza que la tuvo en vilo hasta que, viendo la segunda semifinal en zona mixta al lado de los periodistas a los que después atendió, se confirmó la eliminación. “Sabía que los puestos estaban cogidos, era una serie muy dura pero he disfrutado corriendo con ellas en grupo”. Y así terminó un año de ensueño para la que todos coinciden en calificar como la gran revelación de esta temporada.

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