Running, el mejor aliado del sexo
Por Javier Ullé para carreraspopulares.com
Cuando uno hace deporte con regularidad, particularmente cuando correr habitualmente forma parte de nuestras vidas, es habitual preguntarse cómo afectará el running a nuestra vida sexual. Y lo cierto es que la pregunta debe tener su importancia. Un estudio de la Universidad Estatal de Ohio, publicado en el Journal of Sex Research, llegó a la conclusión de que los hombres piensan en cuestiones relacionadas con el sexo unas 19 veces al día, mientras que las mujeres lo hacen unas 10 veces.
Los runners conocen cada vez más todas las bondades de la práctica de la carrera a pie: ayuda a eliminar el estrés, mejora la capacidad cardiopulmonar, nos ayuda a mantener la línea, reduce los riesgos de padecer enfermedades crónicas. Y así un larguísimo etcétera que, al final y de manera sintética, hará que tengamos una larga y saludable vida.
¿Mejoran las capacidades sexuales con la práctica deportiva? Y, recíprocamente ¿afecta de alguna manera las relaciones sexuales a mi desempeño como corredor/a?
Correr incrementa la confianza y la autoestima
Crea una imagen positiva de nosotros mismos. La falta de confianza y no estar satisfechos con nuestro propio cuerpo pueden afectar negativamente a nuestra vida sexual.
La imagen que tenemos de nosotros mismos, cómo pensamos y nos sentimos con respecto a nuestra apariencia física, tienen una importancia capital en cómo nos relacionamos con los demás. Si no nos sentimos satisfechos, esto tendrá impacto en nuestras interacciones. Es posible incluso que evites determinados encuentros sociales o sexuales porque no te sientes con confianza.
Un ejercicio sencillo como es la práctica del running puede mejorar tu físico, y lo que es aún más importante, darte un plus de confianza, que puede ser importante durante las actividades sexuales.
Investigadores de la Universidad de Arkansas concluyeron que hombres y mujeres en buena forma física mostraban más deseo sexual que otros sedentarios en el mismo grupo de edad.
Mejora el estado de ánimo
El subidón de después de correr provocado por ese pelotazo de endorfinas ha demostrado ser el antídoto perfecto para aliviar síntomas como la depresión, que es un serio inhibidor del deseo sexual. Salir a correr libera unos compuestos químicos cerebrales (endorfinas) que nos ayudan a sentirnos más felices y calmados.
Otro inhibidor habitual del deseo sexual es la sensación de fatiga y el cansancio. Sin embargo, el ejercicio y la liberación de endorfinas que provoca contribuyen a un aumento de los niveles de energía. Y aunque pueda parecer que la práctica regular de ejercicio hará que nos sintamos más cansados, es justo al contrario, y, progresivamente, incrementará la sensación de energía, particularmente en personas sedentarias.
Correr hace que aguantes más
Un estudio publicado en la American Journal of Cardiology encontró sólidas conexiones entre la resistencia que aporta el running y la resistencia sexual.
Más concretamente, cada minuto extra desgastando zapatillas tiene como resultado unos minutos adicionales en la actividad sexual.
Si corremos con regularidad tendrá su reflejo en nuestra capacidad cardiaca, respiratoria y la actividad muscular, pudiendo mejorar la capacidad y satisfacción sexual, que tendrá como resultado una mejor vida sexual.
Además, el ejercicio aeróbico vigoroso como el running mejora la circulación. Y esto es un factor clave en la respuesta sexual: una buena circulación reduce la posibilidad de disfunción eréctil para los hombres.
La actividad sexual es una experiencia que involucra a todo nuestro cuerpo, por tanto, es muy importante mantener la musculatura, el sistema circulatorio y el sistema nervioso funcionando a buena capacidad.
ZAPATILLAS
