Cómo convertir el running en un hábito en 6 pasos
Por Marisol Galdón para carreraspopulares.com
Si has llegado hace poco a este deporte, estás empezando a probar o si has estado un tiempo sin ponerte las zapatillas, posiblemente te estés enfrentando a un dilema. Te gustaría correr más a menudo pero no acabas de encontrar esa regularidad que sería necesaria para sacarle partido a una actividad física que te va a dar muchas alegrías.
Es cierto que al principio, o tras un periodo de inactividad, puede ser difícil construir un hábito alrededor del running. No es de extrañar: como toda afición, necesitamos tiempo para llevarla a cabo. Como tiempo necesita el hecho de construir un hábito y una recurrencia alrededor de la práctica deportiva.
¿Cómo podemos adquirir el hábito de correr en poco tiempo?
Si has decidido que quieres correr, si has comprobado que te gusta y quieres pasar a hacerlo más a menudo, te dejamos estos consejos para que te enganches definitivamente:
1. Poco a poco. Intentar quemar etapas muy rápido te puede hacer frustrarte, lesionarte o algo peor. No intentes ponerte objetivos demasiado ambiciosos y por supuesto, no trates de hacer cosas que has visto que hacen otros o solo porque lo hayas visto por ahí. Cada uno necesitamos nuestro tiempo de adaptación y son mucha cosas las que tenemos que adaptar al ejercicio (músculos, sistema respiratorio, nuestra mentalidad...). Si intentas ir más rápido o hacer muchos más kilómetros de un día para otro solo tendrás consecuencias negativas. Así que paciencia y a disfrutar, que esta afición te va a durar toda la vida si la cuidas bien.
2. Elabora un plan. Aunque no es necesario que sea nada muy elaborado, es buena idea tener un objetivo en mente, como participar en una carrera o superar X número de kilómetros seguidos dentro de 4-5 meses. Un objetivo (y un plan para llegar a él te hará seguir adelante). Por ejemplo, una buena idea es aumentar el tiempo que corres 2-3 minutos cada semana y cuando seas capaz de correr más de media hora del tirón, añade un día extra a tus entrenamientos.
3. Dale la importancia que merece. No confíes en que sacarás tiempo para correr entre tus ocupaciones porque muy pocas veces es así. Si quieres correr a menudo, debes situarlo en tu agenda diaria con prioridad alta e intentar que no se interpongan obstáculos o ladrones de tiempo. Al principio tendrás que renunciar a cosas, pero es la única manera de sacar tiempo. Cuando lleves más tiempo corriendo, verás como todo va encajando y te da tiempo a llegar a todo.
4. Utiliza una aplicación para medir tus entrenamientos. Tener un sitio donde ver tus progresos solo te hará que quieras seguir avanzando. Aplicaciones como Runtastic, Strava, Endomondo e incluso la aplicación de fitness de tu smartphone recopilarán la información de tus carreras, sumando tus kilómetros semanales y haciendo más fácil motivarte.
5. Hazlo disfrutable.Intenta no correr siempre el mismo circuito, ni de la misma manera. En Internet puedes encontrar sesiones diferentes como series, pirámides, fartlek o cualquier variación que haga que no te resulte monótona la sesión. No te obsesiones con tiempos y ritmos, lo importante es seguir avanzando.
6. Compártelo. Usa el postureo a tu favor. Cuando completes un entrenamiento, o una semana entera sin faltar a tu cita con el running, presume de ello en tus redes. Si algo tienen las redes sociales es precisamente que pueden reforzar de manera positiva tus conductas. Verás cómo enseguida alguien te felicita o incluso te pregunta cuándo corres para compañarte. ¡Si correr engancha, hacerlo en compañía mucho más!
Y un último consejo adicional: no te pongas excusas. Si quieres correr, acabarás sacando tiempo aunque el día no te lo ponga fácil. Piensa que todos los que ves corriendo en los parques también tienen (en su gran mayoría) obligaciones familiares, laborales o de cualquier otro tipo. Si los demás pueden ¿qué te lo impide a ti?