El primer medio maratón
Por Mario Trota para carreraspopulares.com
En realidad, quizá este texto no debería incluirse en la serie denominada "Guía del corredor novato", porque está claro que si acabas de empezar a correr lo más desaconsejable es que pienses siquiera en hacer un medio maratón. Pero ni siquiera dejar que se te pase por la cabeza. Pero es cierto que si vas a correr tu primera carrera de 21 kilómetros y casi 100 metros, al menos serás novato en esa distancia. Y me temo que es posible que seas un novato total pero ya estés a punto de inscribirte en tu primer medio maratón. ¡Espera!
Yo ya llevo unas cuantas a mis espaldas y tengo que decir que, como una amplia mayoría de corredores, la primera llegó demasiado pronto. Apenas unos pocos meses después de empezar a correr. Me piqué con un amigo que corría menos que yo, nos ´calentamos´ con una apuesta tonta, y cuando me quise dar cuenta ya estaba en la línea de salida con más dudas que ganas.
Aquí no trato de explicar cuáles son los entrenamientos que debes seguir, la alimentación que tienes que llevar o las veces que sería recomendable que acudieses al fisio antes de la carrera. Para eso ya hay profesionales que escriben muy bien y saben más que yo.
Pero los que hemos vivido esto desde la perspectiva del corredor popular y hemos cometido errores (y algunos aciertos) debemos apoyara a los que estáis a punto de cometerlos. Si hace unos años alguien me hubiera explicado bien ciertas cosas no habría hecho lo que hice. ¡O quizá sí!
Impacientes
El caso es que NO, no debes apuntarte a un medio maratón a los dos o tres meses de empezar a correr. Ni siquiera a los seis meses. La experiencia (y la de muchos amigos runners) me dice que es mejor aguantar un año, correr varias carreras de 10 kilómetros, alguna de 15 si tienes la suerte de que se organice alguna cerca de tu casa y te cuadre, y progresar en la distancia poco a poco.
Sí, ya sé que estás ansioso por dar pasos y seguir avanzando en tu camino hacia la gloria de la distancia, pero todo a su debido tiempo. Lo que puedes hacer es algo que yo no hice en su día: ponerte en manos de un profesional, un entrenador que te guíe y te marque un plan a seguir.
Porque si no, harás como yo. O como mi cuñado mucho tiempo después (¡y mira que se lo avisé!). Aunque ya había corrido tres o cuatro carreras de 10 kilómetros y había hecho una tiradita con unos amigos de 15 kilómetros, para alejar las dudas sobre mis opciones en la carrera, dos semanas antes corrí 21 kilómetros por mi cuenta. Por nada en especial, solo para saber si era capaz de acabar un medio maratón. En aquel momento tenía sentido. Ahora me parece una tontería más de las que cometí entonces.
No hace falta que corras un medio maratón para demostrar que eres capaz de terminar un medio maratón. Y alguno puede pensar que esto ocurre en casos aislados. No. Sigue ocurriendo, muchas veces. Con toda la información que tienen a su alcance los novatos, más que antes, y siguen cometiendo los mismos errores.
¿Estrategia?
En fin... que no, que con hacer una tirada de 16 o 17 kilómetros antes del día D es suficiente. Pero bueno, eso ya te lo explicará el entrenador que te haga el plan.
También te dirá que el día de la carrera tienes que ser consciente de que un medio maratón no es sólo dos carreras de 10 kilómetros seguidas y un poco más. No. En realidad es eso, un medio maratón. Cuando la distancia aumenta, tu ritmo es más lento. O debe serlo. Porque tienes que aguantarlo durante más kilómetros. Pero la estrategia en el primer medio maratón es muy sencilla: no hay estrategia. Sólo sentido común. Sal tranquilo, suave, cómodo, y acaba pensando eso de: "¿Ya está? ¿Ya hemos acabado?". Nada de ritmos, ni planificar pasos por kilómetros ni agobiarse con el reloj.
Yo tengo que decir que en realidad mi primer medio maratón no fue tan mal. De hecho, hice una marca genial (se ve que estaba hecho para esto de correr y no lo sabía) y acabé deseando correr más. Curioso. Pero al día siguiente mi cuerpo estaba demasiado dolorido y soy consciente de que no debería haber dejado pasar tan poco tiempo antes de lanzarme a la distancia.
Así que, ya sabes: entrena bien, libera tu mente, disfruta de la carrera y acaba con ganas de más. Pero, ¡ten mucho cuidado! Muy probablemente, si sigues estos consejos y todo sale bien, cuando cruces la meta te asaltará otra idea, otro reto: ¡correr un maratón!
Destierra la idea de tu cabeza, amigo. Que para eso aún falta mucho. ¡Y todavía no has corrido ni un medio maratón!
Mario Trota
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