Maratones fuera de lo común (I). Maratones extremos.
Por Luis Miguel del Baño para carreraspopulares.com
Si correr un maratón es ya una experiencia increíble para un corredor, correrlo por los lugares más remotos y mágicos de la tierra eleva esta prueba al nivel de desafío. En el planeta encontrarás algunas carreras fuera de lo común, que ponen a prueba al ser humano o que regalan paisajes y sensaciones que no se olvidan. Estos son solo algunos de ellos.
1.- No apto para gente con vértigo: Maratón del Everest
No te descubriremos nada nuevo si te decimos que es el Maratón más alto del mundo . Eso es bastante obvio. Se comenzó a hacer en 1985 desde el campamento base del Everest, y ese año tardaron 12 horas en completar los 42 kilómetros.
El trazado es, mayoritariamente, en pendiente descendente. La línea de salida se encuentra en Gorak Shep (a 5184 metros de altitud) cerca de campamento base del Everest, en Nepal. El final es en el pueblo sherpa de Namche Bazaar (a 3446 metros). Ellos mismos se definen como “la carrera más espectacular del mundo que se celebra cada año”
La organización obliga a los participantes a estar en Nepal tres semanas antes de la carrera para aclimatarse a la altitud. Aseguran que son unas “vacaciones con visitas turísticas”, pero también es necesaria, atención, “una caminata de 14 días hasta el punto de partida del maratón bajo supervisión médica”.
El trazado es prioritariamente cuesta abajo, aunque hay hay dos tramos muy duros con pendiente ascendente. Es una carrera que pone el cuerpo al límite, ya que se debe saber correr en montaña y en condiciones extremas. A la altitud se unen también zonas de hielo y nieve.
El récord se estableció en 2013 con 3 horas, 40 minutos y 43 segundos
2.- Prepárate para los escalones: Maratón de la Gran Muralla
Las imágenes hablan por sí mismas. La Gran Muralla es una de las pocas estructuras humanas que se distingue desde el espacio, pues imagínatela llena de corredores. El Maratón de la Gran Muralla , que tiene origen en la plaza del Ying y el Yang de la provincia de Tianjin, es uno de los grandes eventos del año en la zona. Ellos mismos se definen como “uno de los maratones más desafiantes del mundo”.
De hecho, es uno de los pocos días del año en el que la Muralla se cierra a los visitantes para asegurar que los corredores puedan transitar por la zona en condiciones óptimas. El trazado pasa junto a pueblos tradicionales donde los habitantes salen a recibir a los corredores.
Las subidas y bajadas son constantes, y es de las pocas carreras del mundo donde los escalones son un elemento más en el trazado, habiendo de superar 5.164. En la última edición hubo 2.500 corredores de 60 nacionalidades. El primero en llegar a la meta fue el atleta chino Shen Jason, con un tiempo de 3 horas y 41 minutos que habla bien a las claras de la dureza de la prueba.
3.- Abrígate bien: Maratón del Círculo Polar
Tiene lugar en Groenlandia, en Kangerlussuaq. Su tarjeta de presentación impresiona, ya que ellos mismos aseguran que “el hielo sin fin y la tundra ártica constituyen el telón de fondo de esta inusual carrera en el que pasarás por lenguas glaciares y el silencioso desierto ártico”.
No hay duda de que es maratón el más frío de la Tierra. De hecho, es un maratón congelado, ya que se puede llegar a correr a 20 grados bajo cero. Eso sí, la belleza es extrema, y el silencio de la zona, absoluto. Solo escucharás tu respiración y el sonido crujiente de la nieve bajo tus pies. La fauna no es uno de los principales peligros, aunque durante el recorrido te puedes encontrar zorros árticos. Una parte de la ruta se realiza sobre una capa de hielo, pero la parte principal es un camino de grava a menudo cubierto de nieve.
El récord lo tiene Andrew Shaw, con 2 horas, 57 minutos y 19 segundos. No está mal para ir repleto de ropa. Y un dato que nos hace sacar pecho: el madrileño Ángel Pavón ganó la prueba de medio maratón en 2014.
4.- Correr en Kenya: el Safaricom
Correr en Kenya debe ser una delicia para cualquier maratoniano. Pues bien, este evento es, si cabe, más especial aún. Se corre por dentro de la reserva de Lewa, a unos 200 kilómetros al norte de Nairobi. La reserva cuenta con una de las mayores poblaciones mundiales de cebras, grandes manadas de elefantes y mas de 100 rinocerontes entre otros animales como leones. Eso sí, los participantes están acompañados en todo momento por guardas armados. Su objetivo principal es recaudar fondos que reviertan en la comunidad local.
El trazado consiste en dos vueltas a un circuito de 21 kilómetros, y la altitud media a la que se corre es de 1.700 metros. En la última edición, el vencedor hizo un tiempo de 2 horas, 18 minutos y 9 segundos. Como no podía ser de otra manera, a pesar de que acuden corredores de todo el mundo, el ganador fue un keniata: Philemon Baaru.
5.- Bajo la mirada de la montaña mágica: Maratón del Kilimanjaro
El Kilimanjaro es la montaña más alta de África, pero tranquilos que no lo tendréis que subir. La carrera cuenta con algunos desniveles, pero transcurre entre 830 y 1.150 metros de altitud. Ha sido creada para promover el deporte en Tanzania y cuenta con el apoyo de la AIMS.
Uno de los grandes alicientes es que el trazado pasa por remotas localidades donde no están acostumbrados a ver semejantes escenas y los aldeanos salen a las puertas de sus casas para animar a los participantes.
En el kilómetro 32 encontrarás un gran alivio, ya que a partir de ahí la pendiente es descendente.En África las cosas se hacen con un estilo diferente al que estamos acostumbrados. En esta prueba lo notarás a fondo.