Algunos buenos propósitos para el nuevo año runner
Por Javier Ullé para carreraspopulares.com
Con la llegada del nuevo año todo son, y todos nos hacemos, listas con cosas que nos gustaría cambiar, o comenzar a hacer, y claro, en el mundo del running no podía ser diferente.
Seguro que hay determinadas cosas que deberías incorporar a tus rutinas para sentir que las haces como Dios manda. O simplemente hay algunas cosas que has de empezar a hacer con tal de sentirte “corredor de pleno derecho”. También puede ser que seas todo un runner experto y, sin embargo, en tus diálogos internos bien sepas que hay unas cuantas cosas que tienen un amplio margen de mejora, y que no las llevas a cabo por que te haces el remolón, o por otro tipo de mundanas razones.
Sea cual sea tu status quo o punto de partida, este es el momento perfecto para comenzar a poner en práctica unos cuantos buenos propósitos. Te vamos a ayudar con algunas ideas en las que poner el foco.
Encontrar tiempo para estirar
Venga va, estirar no es el mejor momento del entrenamiento, y, sin embargo, todos sabemos de su importancia. Es tan importante que debería formar parte del mismo siempre. Es preferible correr cinco minutillos menos y dedicarlos a estirar que no hacerlo. Cinco minutillos después de cada entrenamiento pueden marcar la diferencia. La diferencia entre tener que parar por una lesión o por molestias de cualquier tipo, o mantener las lesiones a raya.
Cuando haces ejercicio los músculos trabajan: se contraen y expanden muchas veces. Cuando terminas tu entrenamiento necesitan reducir la intensidad y retomar un estado de quietud nuevamente. Los estiramientos ayudan a los músculos a hacer ese cambio y a lograr un balance que les permita continuar funcionando sin quedar resentidos el resto del día.
Para los corredores los principales músculos a estirar son: gemelos, sóleos, cuádriceps, isquiotibiales, glúteos y la espalda baja. Recuerda que con cinco minutos habrás completado un estiramiento decente que tu cuerpo agradecerá.
Empezar de una vez con ese diario de entrenamiento
Registrar tus entrenamientos es una práctica realmente útil. Un recurso formidable al que podrás regresar siempre que lo necesites y sin del que sin duda extraerás un buen aprendizaje. Te permitirá conocer las razones, qué tipo de entrenamiento hiciste cuando lograste tu mejor marca personal en esos 10k, o darte unas pistas importantes de porqué sufres una sobrecarga muscular.
Mantener tus registros también te puede servir de motivación adicional para ver de forma gráfica los progresos que vas haciendo en tu vida de corredor.
Probar con cosas diferentes
Seamos honestos, los seres humanos (incluidos los corredores) tendemos a acomodarnos. Adquirimos determinadas costumbres en las que nos encontramos seguros y cómodos y nos cuesta salirnos del guión que ya nos conocemos para probar cosas nuevas.
¿Qué tal si nos adentramos en territorios desconocidos? ¿Por qué no probar carreras con distancias a las que no estamos tan acostumbrados, o participar en alguna de esas carreras de obstáculos que están tan de moda? Si bien salirnos de nuestra “archinombrada” zona de confort puede resultar un poco duro al principio, sin duda será una buena forma de mantenernos con la motivación en niveles adecuados.
Trabajar en nuestras debilidades
Seguro que cada corredor tiene su némesis en el entrenamiento. Puede que sean esas series infernales, las malditas cuestas o el trabajo de fuerza.
Está en nuestra naturaleza el huir de aquello que no nos gusta, pero el camino hacia nuestra mejora como corredores solo, valga la redundancia, conoce un camino: trabajar nuestras debilidades y amar, hasta cierto punto, nuestra némesis.
Mejorar nuestra salud
Seguro que la gran mayoría de los que leéis este artículo comenzasteis a correr en búsqueda de la salud, bien para perder esos kilitos de más, bien como terapia para combatir el estrés, o, incluso, como complemento a nuestra batalla contra la nicotina. ¡Esto es algo que nunca deberíamos de olvidar!
Por lo tanto, dejemos de escatimar en gastos importantes como es comprar unas zapatillas cuando las que tenemos están ya muy deterioradas. Unas zapas muy desgastadas han perdido toda su amortiguación y nos pueden provocar lesiones. Igualmente, es preferible acudir al fisio con un poco más de asiduidad de lo que lo hacemos. Es mejor recortar de otras cosas que son mucho más prescindibles y gastar en aquello que es indispensable.
¡Feliz 2020 runners!
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