Septiembre: las lesiones típicas de la vuelta a los entrenamientos
Por Tono Fernández para carreraspopulares.com
Avanza septiembre, el mes de la vuelta a la rutina. Son jornadas de retomar nuestras actividades cotidianas. El día a día se impone y, entre todas esas cuestiones, también están nuestros entrenamientos.
Quizás en verano hayamos seguido corriendo, pero muchos de vosotr@s puede que lo hayáis hecho con otras rutinas diferentes a las del resto del año. Y eso si es que habéis seguido corriendo, ya que también en verano es un buen momento para tomarse un merecido descanso.
Pues bien, volver a la rutina es algo positivo, pero hay que saber cómo hacerlo. Si, de repente, regresamos a nuestros entrenamientos con más ímpetu de lo normal, podemos caer en alguna típica lesión por esa causa. Así es que, recordad, los mejores consejos son:
- GRADUAL. Volved a los entrenamientos y a la rutina de una forma gradual. Si habéis estado corriendo poco durante el verano o de manera irregular, las dos primeras semanas de ‘normalidad’ que sean poco a poco, usadlas como una reentrada.
- FUERZA. Es una de las claves. Son semanas ideales para introducir trabajo de fuerza complementario a las carreras. Unos buenos ejercicios potenciarán tus músculos, te ayudarán a correr más y mejor y a demás, te evitarán lesiones.
- CONSEJO PROFESIONAL Y PREVENCIÓN. Es lo mejor que podrías hacer. Un buen entrenador y un buen fisio te adecuarán las cargas de entrenamiento para que no sufras problemas. Más vale prevenir que no lamentar.
Las típicas lesiones
Las sobrecargas en momentos como este están a la orden del día. Tened precaución y no caigáis en las lesiones clásicas de la vuelta a la rutina:
Tendinitis rotuliana
¿Qué es? Nuestras rodillas son una articulación clave a la hora de correr. Algunas de las típicas lesiones que más nos afectan, tiene que ver con ellas, como las de cintilla iliotibial o el caso de la tedinitis, que puede aparecer por un mal gesto asociado a debilidad o por microtraumatismos repetitivos.
Síntomas: Encontraremos dolor en la parte posterior de la rótula, en la zona del tendón. Este dolor puede aparecer simplemente al caminar. La articulación puede presentarse rígida y, sobre todo, lo más característico es que encontraremos cierta sensación de debilidad en la pierna.
Tratamiento: El tratamiento dependerá mucho de la intensidad de la lesión. Para los casos más leves será necesaria la aplicación de hielo en la zona afectada tres veces al día. Además, deberemos rebajar la intensidad de nuestra actividad física. Nos podrían venir bien los antiinflamatorios, el aumento de la fuerza en los músculos de la zona y, ¿alguna vez has visto esas bandas elásticas que la gente se coloca justo bajo la rótula? ¡Bingo! Para casos más graves, la recuperación puede pasar incluso por la cirugía
Periostitis tibial
¿Qué es? Consiste en la inflamación del periostio de la tibia, es decir, la membrana externa que recubre los huesos. Suele aparecer cuando se incrementa bruscamente la carga de entrenamiento o cambiamos de superficie en nuestros entrenamientos.
Síntomas: Generalmente descubrirás esta lesión porque aparecerá dolor en la cara interna de la tibia, entre la rodilla y el robillo. Además, podrás notar unas pequeñas protuberancias con forma de bolitas a lo largo de la tibia.
Tratamiento: Te vendrá muy bien el hielo (unas 3 veces al día), en la zona afectada. Si puedes reducir el volumen de tus entrenamientos, mejor. Y si te duele mucho, deja de correr y ves al fisioterapeuta. Una buena musculatura del tren inferior también ayuda.
Fascitis plantar
Es otra de las clásicas lesiones por sobrecarga. Tiene lugar cuando se nos inflama la fascia plantar, una banda de tejido elástico que se extiende desde el calcáneo hasta la zona metatarsal, situada delante de los dedos. Esta estructura tiene una función vital a la hora de correr ya que absorbe y devuelve la energía que se produce cuando el pie impacta contra el suelo.
Síntomas: El principal síntoma que encontraremos es el dolor que se produce en la zona próxima al talón. Suele ser un dolor más intenso al inicio de nuestra actividad, para ir remitiendo o disminuyendo conforme calentamos la zona.
Tratamiento: por una parte, trataremos de disminuir el dolor y la hinchazón con hielo y antiinflamatorios. Pero debemos ir a la causa del problema. El pisar sobre superficies demasiado duras y, sobre todo, pisar de manera inadecuada suelen ser un punto de partida de este trastorno. En ocasiones, aparece tras periodos de inactividad si hemos ganado peso o de repente estrenamos zapatillas.
Tendinitis Aquílea
¿Qué es? Es una de las clásicas lesiones que pueden aparecer por sobrecarga. Puede aparecer tras intensas sesiones de entrenamiento en las cuales los músculos no se recuperan lo suficiente. Se puede producir por cargas excesivas o incluso por una mala elección de nuestro calzado o mala mecánica de apoyo.
Síntomas: Nuestro tendón de Aquiles resulta inflamado, hinchado y duele a nivel del talón. Aparece dolor en el talón y a lo largo del tendón al correr o incluso al caminar. El tendón puede doler incluso solo con tocarlo.
Tratamiento: El hielo es positivo para que el dolor y la infamación remitan. Además, deberías rebajar tu nivel de actividad, tu peso o tratar de correr en superficies mas suaves. Asegúrate que, además, tu calzado es el adecuado para ti. Esta lesión te puede acompañar una largo periodo de tiempo, consulta con un profesional.